30 Julio – Contra la trata de personas

 

Este miércoles se celebra el primer Día Mundial contra la Trata de Personas, con el objetivo de concienciar de una realidad que afecta a millones de víctimas.

“La trata consiste en utilizar, en provecho propio y de un modo abusivo, las cualidades de una persona. Para que la explotación se haga efectiva los tratantes deben recurrir a la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas”. Con estas palabras define ACNUR, la Agencia de la ONU para los refugiados, la trata de personas.

Millones de personas son víctimas de un negocio que mueve millones de euros y la ONU ha querido dar mayor publicidad a este hecho celebrando este miércoles, 30 de julio, el primer Día Mundial contra la Trata de Personas.

Trata de personas

Las cifras a las que alcanza este crimen –cifras con rostro, nombre y una vida truncada- son desconocidas por su propia naturaleza clandestina. Sin embargo, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) cifra en veinte millones el número de niños obligados a trabajar. “El problema de este negocio es que es realmente global», explica el director ejecutivo de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), Yuri Fedotov, en declaraciones a Efe. Aunque reconoce que no se pueden aportar cifras concretas, señala que, en cualquier caso, ascienden a «millones de hombres, mujeres y niños». Esta oficina estima, además, que el 79 por ciento del total de la trata de personas tiene como propósito la explotación sexual, dato que puntualiza la OIT al señalar que, de este porcentaje, el 98 por ciento son mujeres.

También son las mujeres las mayores afectadas por la trata de personas, según indica un informe publicado por UNODC en 2012, pues representan el 59 por ciento de las víctimas, mientras que el 17 por ciento son niñas, el 14 por ciento hombres adultos y un 10 por ciento de varones menores de edad.

Se trata, en todo caso, de un negocio muy lucrativo que mueve 32.000 millones de dólares anuales, según explica Fedotov, y que tiene carácter trasnacional, pues en 2012 se detectaron víctimas de 136 nacionalidades en 118 países de destino.